Jacareí, 18.06.2023 | Mensaje de Nuestra Señora Reina y Mensajera de la Paz

REINA Y MENSAJERA DE LA PAZ

 

Jacareí, 18.06.2023 | Mensaje de Nuestra Señora Reina y Mensajera de la Paz comunicado al vidente Marcos Tadeu Teixeira - Jacareí - SP - Brasil - Aniversario de las Apariciones de Garabandal 

Queridos hijos, hoy os llamo de nuevo a la oración. ¡Rezad! ¡Rezad! ¡Oren! Porque el mundo se encuentra ahora en una gran encrucijada. Debe elegir entre vivir o morir eternamente, y sólo con vuestras oraciones el mundo podrá tomar el camino correcto. Rezad, pues, el Rosario todos los días. Y vosotros, que estáis alejados de la oración y tratáis de distraeros con todo para no rezar, ¡volved a la oración! Imitad el fervor de mis hijos de Medjugor al comienzo de mis apariciones: ¡orad! ¡Rezad! ¡Rezad con el corazón, sin cesar! Hijo mío Marcos, debes hacer todo lo que te he dicho en las apariciones de este año. El tiempo corre rápido. Ya ha pasado la mitad de este año y ahora queda poco tiempo para que todo suceda. Los acontecimientos que deben desvelar los primeros secretos están ya por fin en marcha, como tú mismo sabes. Y ahora ya no hay tiempo que perder. Queda muy poco por hacer, porque el tiempo se acaba. Corre, hijito mío, corre a realizar todo lo que te he dicho. Si no, el tiempo se acabará. Mi hora está a punto de terminar y, cuando llegue, la justicia de Dios se desatará sobre el mundo entero. Como Madre de Misericordia he venido al mundo, especialmente en estos últimos 200 años, como nunca lo he hecho en toda la historia de la humanidad, para dar mis mensajes. Como Madre de Misericordia he hecho de todo para salvar a mis hijos. Me he aparecido, he llorado, he dado señales, advertencias, lo he hecho todo, pero la humanidad ha continuado en su camino de desprecio por mi voz maternal, por mis mensajes y por el amor de Dios. Pronto tendrá el pago que ha merecido por esta decisión suya. Corre, hijo mío, corre para que verdaderamente algunas almas, algunos elegidos, puedan todavía salvarse. Sólo tú puedes dar a conocer mis apariciones a los niños que aún las necesitan, antes de que se acabe el tiempo.

El tiempo se acaba y ahora tienes que sacrificarte aún más. Debes sacrificarte aún más para salvar a mis hijos. Por eso, trabaja aún más, hijito, para dar a conocer mis apariciones en todo el mundo, porque sólo a ti te interesa, sólo a ti te gusta hacerlo, sólo tú eres capaz de hacerlo con la gran llama de amor que he puesto en tu corazón. Y una vez más os digo: no os importen las actitudes de las personas frías, insensibles a mi voz. Ellos no tienen la misma llama de amor, por eso no pueden comprender lo que dices y tú tampoco puedes comprender sus actitudes contradictorias. Así que no te preocupes. Fija tu mirada en lo que te he dicho y trabaja, trabaja duro antes de que se acabe mi tiempo y el tuyo. Yo estoy contigo y nunca te abandonaré, mi rayo de luz. Con esta poderosa llama de amor que tienes, cegaré a Satanás. Sí, el resplandor de esta llama de amor tuya unida a la mía, a la de mi llama de amor, ensombrecerá a Satanás y le hará caer al suelo con todos los demonios, aniquilado para siempre. Os lo he dicho muchas veces y os lo repito: ¡será a través del resplandor de vuestra llama de amor como triunfaré! Será a través de tus obras de amor que triunfaré, y contra estas obras de amor nada, ningún argumento puede, porque contra las obras de amor, contra la verdad, nada, ninguna mentira, ningún ataque del enemigo tiene poder. Por lo tanto, hija mía, trabaja intensamente, incansablemente todavía por mí, porque hay almas de buena naturaleza que todavía pueden ser salvadas, que todavía pueden ser traídas a mi corazón. No pierdas el tiempo con la paja. Id en busca del trigo que es escaso, pero existe. Y con él, con este trigo, haréis pan sabroso para mi hijo Jesús. Te bendigo con amor y derramo ahora sobre ti mi gracia y mi paz. Vivo en tu corazón como en mi jardín de descanso y permanezco allí siempre. Esta poderosa llama de amor que he puesto en tu corazón junto con los sufrimientos que te he permitido esta semana han salvado 188.000 almas. Sí, te permití el sufrimiento de tener tu presión física alterada, para que con este sufrimiento y los dolores de esta semana, más y más almas fueran salvadas. Continúa siendo mi sacrificio vivo de amor y te daré en el Cielo la corona, la recompensa, el premio merecido y debido a los que son violentos y valientes en el sacrificio y en el amor. A ti y a todos mis hijos os bendigo, os doy mi paz y os digo: ¡adelante! ¡Daos prisa! ¡Apresuraos a la conversión! Os bendigo a todos desde Pontmain, desde Medjugorje y desde Jacareí. MENSAJE DE NUESTRA SEÑORA DESPUÉS DE TOCAR LOS OBJETOS RELIGIOSOS (María Santísima): "Como ya he dicho, allí donde llegue uno de estos objetos santos, allí estaré yo viva llevando conmigo las grandes Gracias del Señor. ¡Adelante, mi pequeño hijo Marcos! Enciende el mundo entero con la llama de amor que he puesto en tu corazón. Así como los metales arrojados al fuego se funden y se hacen uno, todos los que unan sus corazones asimilándose a ti se convertirán en una sola llama de amor para alabanza del Señor y para alabanza de mi Corazón Inmaculado. Os bendigo de nuevo a todos y os dejo mi paz. Id. Anunciad mi palabra a todos mis hijos. Que el signo, que el milagro de la llama de la vela que no te quemó la mano se muestre a todos mis hijos, para que vean el esplendor de la verdad de mi presencia maternal aquí entre vosotros. Paz".